Item Descripción Valor

Una llamada y el ejército no tarda más de 15 minutos en presentarse. Os han sugerido que no os movierais del lugar, pero que buscarais un lugar seguro y dejarais el teléfono encendido para poder localizaros.

El escenario cada vez es peor. Vuestro coche ha sido engullido junto a unos pocos más por la propia tierra de la montaña. Del suelo comienzan a surgir una especie de babosas enormes que no parecen tener ojos, ni boca, ni una parte delantera o trasera; y se adhieren a árboles y animales.

Para cuando el primer helicóptero llega vuestro escondite ha sido destruido y solo podéis correr evitando todo lo que va apareciendo a vuestro paso, extrañas criaturas que o bien han sido deformadas, o directamente no pertenecen a la Tierra.

Corréis en busca de ayuda, una cuerda, una escalera lo que sea, pero vuestras esperanzas caen al igual que lo hace la aeronave cuando un gigantesco tentáculo surge del suelo, derribándola.

Paco y tu os detenéis en seco, miráis a vuestro al rededor y finalmente asumís que este, es vuestro final.

Nada más hacerlo varios rayos salen del portal y te atraviesan. Sientes un fuerte dolor y caes al suelo. Puedes ver como Paco te agarra y te mira. En su mirada puedes ver amor, una lagrima cae por su mejilla y te arroja al interior del portal. El tirón hace que cierres los ojos.

Cuando los abres ves que te encuentras rodeado de oscuridad. Mueves los pies pero no encuentras nada sobre los que apoyarlos. Los brazos tampoco alcanzan a tocar nada. Es como si estuvieras flotando.

Una profunda, grave y ronca respiración que parece provenir de todas las direcciones hace que se te erice el cabello de todo el cuerpo y es entonces cuando lo ves.

Cientos de tentáculos surgen de lo que podría ser un enorme rostro deformado situado a un par de metros de ti... Uno de ellos se acerca a ti, y con lentitud comienza a atravesarte el estómago hasta que sale por la espalda. No has sentido dolor, ha sido como si tu cuerpo fuera mantequilla. Tus ojos están fijos en aquel rostro y pronto pierdes toda consciencia de ti mismo, sumergiéndote en la oscuridad del lugar que te rodea.