Contra todo pronóstico Johny Starr siguió con su novia de instituto, Irina Smiles, hasta el mismo día de su muerte. En la prensa le han achacado cientos de romances y por supuesto la pareja ha pasado por toda una montaña rusa de rupturas y regresos, alimentando la cuenta de la chica con exclusivas y la fama de chico malo de Starr con cada vaivén que daban.

Ahora la muchacha está sentada en la sala de interrogatorios esperando tus preguntas. No parece especialmente nerviosa ni afectada. Quizás algo enfadada y bastante cansada. Es una actitud extraña para alguien a quién le ha muerto su media naranja.

La chica aguarda desafiante tus preguntas, como si estuviera de vuelta ya de todo.