Item Descripción Valor





Aunque tu camuflaje no lo mostrase, estabas herido y sangrando, y la carrera no había ayudado precisamente a mejorar tu estado, por lo que no tenías ni las energías ni la entereza suficiente como para intentar engañar a la patrulla. Por ese motivo giraste para esquivarla y proseguir hacia tu nave, aunque no por ello dejaste de observar a los miembros de la patrulla.

Por un instante, parecieron hacer un amago de seguirte, pero justo en ese momento tus perseguidores giraron la esquina, con las armas en alto y, por desgracia para ellos, quedando a la vista de la patrulla, quienes al verles, se olvidaron de ti y salieron a perseguirles. Te habías librado… por muy poco.

Afortunadamente, ningún otro impedimento ni encuentro con más de aquellos seres ocurrió durante el resto de tu trayecto hacia tu nave, con el añadido de que esta se encontraba en oculta en un lugar completamente desierto. Aprovechando el momento para recobrar el aliento, miraste a tu alrededor para comprobar que no había más de aquellas criaturas por allí, y tras cerciorarte de ello, desactivaste el desfase dimensional que ocultaba tu nave y entraste en ella. Ya en el interior te dirigiste rápidamente hacia la sala de máquinas para alinear el conmutador dañado y parchear el relé principal con las piezas que llevabas. El tener que estar al mismo tiempo taponándote la herida para minimizar el sangrado no ayudaba, pero aun así, conseguiste reparar la nave antes de que fuese detectada, tras lo cual despegaste y preparaste el sistema de salto para que se activase en cuanto abandonases la atmosfera y te llevase de nuevo al espacio civilizado.

Aquella situación te daba pero que pero que muy mala espina ¿De dónde habían salido? ¿Por qué te pedían que te detuvieses? ¿Eran acaso militares camuflados, una patrulla de incognito, o eran otra cosa? Lo cierto es que no tenías ni la más mínima idea… y tampoco tenías ninguna intención de quedarte para averiguarlo, por lo que rápidamente te giraste y empezaste a correr para alejarte de ellos.

Por suerte para ti, tu rápida reacción impidió que, un cuarto de aquellos seres, al cual no habías visto puesto que se encontraba escondido más adelante de donde estabas, no tuviese tiempo ni de reaccionar ni de detenerte, incluso a pesar de que casi chocaste con él en tu huida. Estaba claro que iban a por ti, aunque eso no explicaba cómo es que habían podido atravesar tu camuflaje y descubrirte sin un escáner cercano. Pero tampoco importaba, al menos no en ese momento, lo importante era escapar y que no te atrapasen… ¿pero escapar por dónde?

Podías correr de vuelta al camino principal, donde podrías despistarles entre la multitud… claro que si sabían que eras, tal vez estuviesen esperándote. O podías internarte aún más en los estrechos caminos secundarios, intentando perderlos en la oscuridad… pero corrías el riesgo de perderte o de quedar atrapado.