La casa de invitados es, efectivamente, pequeña y acogedora. Agradeces poder deshacer tu equipaje y sentarte en una cómoda butaca. El folleto que te ha dejado la administradora Vila sobre la mesilla contiene un mapa detallado de la colonia, además de las normas y los horarios que rigen la comunidad.

Al parecer existen varios turnos en la fábrica, dependiendo del cometido y la sección a la que pertenezca cada trabajador. Telares y mantenimiento de maquinaria pesada ocupan a la mayor parte de ellos.

Los trabajadores también disponen de un comedor -uno de los edificios grandes junto a la fábrica- donde se sirven desayunos, comidas y cenas según los turnos de trabajo. En cualquier caso, la actividad en la fábrica se detiene completamente en la madrugada, durante la que impera una estricta prohibición de deambular por la colonia.

En la zona de dominio la comida se sirve en bandejas que se reparten puerta por puerta. Precisamente acabas de recibir tu comida del primer día, cumpliendo con el horario establecido. Tienes hambre después de la larga mañana, así que decides dar buena cuenta ella mientras planeas tu siguiente paso.