Item Descripción Valor

67

Decides adentrarte en el pasaje. Los cánticos resuenan con más fuerza en las cavernosas paredes a medida que avanzas.


Finalmente llegas a una espaciosa cavidad natural en la que se desarrolla una escena dantesca. El señor Rovira y su sobrino nieto yacen semidesnudos e inconscientes dentro de una estrella de cinco puntas, dibujada sobre el suelo de piedra con algún tipo de polvo verde fosforescente. Los tres rehenes están arrodillados ante tres de las puntas de la estrella. También ves a los cuatro asaltantes, quienes observan el ritual desde un segundo plano con mezcla de asombro y curiosidad.


Zoila Vargas y otra media docena de sirvientes entonan una repetitiva oración, cuya cadencia va en aumento hasta alcanzar un clímax. Contemplas impotente cómo el ama de llaves apuñala el pecho de Cristóbal Merino con una daga serpenteante. Los sirvientes inician de nuevo el canto de la letanía mientras Vargas se dirige a la siguiente víctima, el comisario Torres.


Por suerte nadie te ha visto entrar en la sala, pero debes intervenir rápido.


24

Te encuentras de nuevo en el salón principal de la mansión, una impresionante estancia de dos alturas, en forma de óvalo alargado sin líneas rectas. Tres grandes lámparas modernistas cuelgan del alto techo decorado con mosaico. En la parte más alejada puedes ver una gran puerta doble de madera y vidrio coloreado que parece dar a una amplia terraza exterior.


La fiesta se halla en su momento álgido y la totalidad del salón principal bulle de actividad. Grupos de invitados empiezan a colarse por todos los rincones del gran salón, charlando animadamente, bebiendo y riendo. Los sirvientes caribeños se afanan por mantener las mesas y a los invitados bien atendidos, varios de ellos entran y salen del exterior cruzando las amplias puertas de madera.


Compruebas la hora, son las 9 y 15 de la noche y parece que el señor Rovira no tiene planeado hacer acto de presencia por el momento. Decides que no tiene sentido especular a ciegas sobre cuáles pueden ser las intenciones de vuestro anfitrión, por lo que vuelves a centrarte en tus posibles objetivos con la esperanza de averiguar algo más sobre los motivos de esta fiesta.