Item Descripción Valor





Seguir hacia delante e intentar pasar por donde estaba la patrulla era una completa locura y un auténtico suicidio. No, desde luego no podías arriesgarte a eso, por lo que, tras un mero instante de duda, te diste la vuelta y te alejaste de allí en busca de un camino alternativo para llegar a tu nave... o al menos esa fue tu intención inicial, puesto que apenas habías dado unos pasos cuando una luz te iluminó desde arriba, dándote el alto con una voz sintética.

Para tu desgracia, un dron que no habías sido capaz de ver a causa de las luces sobrevolaba el lugar donde se encontraba la patrulla, y desde su perspectiva había podido detectar fácilmente tu antinatural cambio de rumbo, fijándote como objetivo y alertando a los miembros de la patrulla, que ahora se acercaba hacia dónde estabas, ordenándote también ellos que te detuvieses.

Por supuesto, podías hacerles caso e intentar engañarles, tal vez fuese lo más seguro... o tal vez no, por lo que también podías intentar correr e intentar despistarles por los caminos secundarios, suponiendo que el hecho de estar en un lugar concurrido haría que no fuesen capaces de abrir fuego antes de que pudieses alejarte.

Aunque moverte por la noche era arriesgado a causa de la más que probable presencia de patrullas y controles, aun lo era más esperar a que amaneciese, puesto que no tenías forma de saber si la energía del camuflaje aguantaría... y sin él, no tenías ninguna posibilidad de escapar.

Así pues, cogiste las piezas que necesitabas para reparar tu nave y abandonaste la estructura abandonada que te había servido de refugio hasta el momento. A pesar de que la luz del satélite de aquel planeta apenas llegaba a la superficie debido a las densas nubes de contaminantes que cubrían el cielo, la oscuridad no era un problema, puesto que no eran pocas las luces que iluminaban los caminos… al menos los principales, en los cuales había multitud de aquellas horripilantes criaturas. No tantas como de día, claro está, pero aun así había bastantes, lo cual sin duda te dificultaría el poder darte cuenta de la presencia de alguna patrulla hasta que estuvieses casi encima.

Aunque también tenías la opción de ir por los caminos secundarios que serpenteaban entre las estructuras en las que vivían aquellos seres, caminos angostos, poco iluminados y menos transitados que tal vez te permitiesen llegar a tu nave sin cruzarte con ninguna patrulla.