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En mi humilde opinión se trata de una gran obra del suspense y la autoayuda fallida. Donde nada es lo que parece, los personajes principales se adieren como el azúcar a una cuchara mojada al pobre personaje que trata de huír sin éxito de la amenaza sectaria del grupo umbriano.

Ataja el dilema de la supervivencia contra los elementos extraños, váase dados de más de seis caras, en tuburios infestados de frikis que narran sus experiencias matando dragones y rescatando princesas mientras el propio Cthulhu les sacaba el corazón.

La mente del protagonista sufre en una narración primera persona los extragos de una persecución feroz de su psique, posibilitando la aparición de las temidas migrañas frikeras, que hacen emerger los avatares de seres grotescos y polifacéticos de la web mas subversiva.

El final frenético me tuvo enganchado durante días, contando como consiguió huir con la ayuda de una cucharilla beatificada, al parecer era la auténtica relicquia con la que Chemo devoró el yogurt en el que apareció el premio de la web. Estó provocó que los ejércitos malvados de sectarios umbrianos se lanzaran sobre él como si de una horda de goblins hambrientos se tratara.

La lástima es que en el libro de ediciones Senderos de Umbría, faltan las últimas 25 páginas, por falta de presupuesto o que no cumplian los tiempos de publicación, o ambas a la vez, pero el caso es que me he quedado a medias.

¿Alguien sabe como acaba?