Debo decir que Neil Gaiman como guionista de comics me parece insuperable. En mi estantería ocupan un lugar privilegiado la edición completa de coleccionista de Sandman. Con esto queda claro que es un autor que me gusta.
Y sin embargo no recomiendo este libro. De hecho creo que acabe de leerlo porque no es tan malo como para abandonarlo a la mitad, pero por poco. La historia se basa en una serie de arquetipos muy trillados y de los cuales vas viendo por donde vienen los tiros muy de lejos. Tiene algunos detellos fugaces de la genialidad de Gaiman, pero no duran más de de dos o tres páginas. El toque de humor es muy simple, los personajes no tienen profundidad, la trama es bastante aburrida.
Una pena. Tendré que leer más obras de Gaiman pero como novelista creo que no va a ser tan bueno como guionista de comics.
Ah, eso sí, joder; Gaiman tiene talento de sobra. Es un gran guionista y un escritor notable, en ningún momento pretendí decir lo contrario xD.
Yo no me lo he leído, pero American Gods me encantó. Realmente no cuenta nada, pero me encanta ese estilo que tiene Gaiman para crear mitos. Me gustó especialmente la visión mística que dio a una cosa muy simple: un viaje por los EE.UU. También es verdad que usa mucho la "modernización" de antiguos dioses, como ya hizo en The Sandman, pero me gusta esa idea suya de los dioses como ideas que existen mientras tú creas en ellas y, cuando la gente cambia de creencias o de cosas a las que dedica su tiempo, estos antiguos dioses pasan a ser como parias.
He leído más a Gaiman como guinista que como escritor, pero yo creo que puede sacar más temas, tiene talento de sobra para ello.
A mí me gustó bastante. El estilo de este libro es impecable, la historia es normalita (de hecho es la misma historia que contó en American Gods, que es como este libro pero peor escrito) y el tono, que en mi opinión bebe descaradamente las aguas de Pratchett, me resultó muy divertido.
De todos modos, lo que más echo en cara a este libro es que Gaiman debería empezar a plantearse no contar una y otra vez la misma historia, porque leyendo American Gods me resultó imposible no pensar en The Sandman... y al final, sacando un par de cosillas, parece que siempre vuelve a lo mismo.
Pues a mí me gustó, para qué nos vamos a engañar. Eso sí: durante buena parte de la novela tuve que esforzarme un poco por no abandonarla pero, al final, le descubrí cierto encanto.
Los personajes son arquetípicos y la historia bastante trillada y predecible, sí, pero creo que ahí reside parte de su encanto: comparte estos aspectos con las fábulas de toda la vida, que están presentes a lo largo de toda la historia.
Con todo, Gaiman me parece mejor guinosta de cómics que escritor, pero incluso así se ha ganado mi atención y un hueco en mi estantería.