Conocí al autor a raíz de que mi hermana mediana leyera sus libro cuando tenía quince años. Siempre me picó la curiosidad de leer alguno, así que me lancé a la piscina con éste.
Muy bien narrado, con un estilo intermedio entre el lirismo y el más crudo realismo, sin descartar el uso de vulgarismos, palabrotas o lo que haga falta. Tiene unas muy buenas descripciones y, al menos a mí, me encantó los momentos en que Toni recuerda su juventud y sus años pasados, el modo en que tiene el autor de “levantar las ampollas” sentimentales del protagonista, sus recuerdos más sombríos en un barrio triste y en una época difícil.
La historia, pues del más puro estilo de la novela negra de los bajos fondos: travestis, putas, camellos, bares de poca monta, mafiosos,… Si te gusta Sin City, este libro seguro que te gusta. Además, tiene un buen ritmo y es un libro corto, así que no se hace pesado.
El único problema que le veo es que la trama no llegó a engancharme. No sabría decir porqué, pero me lo terminé por la forma en que está escrito y por la ambientación (ambas muy buenas). Además el protagonista es de tipo “James Bond”, que no hay forma de engañarle, por lo que, al menos según mi opinión, pierde algo de credibilidad. De todas formas es un libro recomendable.
Y la nota: