Esta no es una película bonita ni fácil de ver. Es muy dura y no se ahorra nada a la hora de reflejar la crueldad, sufrimiento y violencia.
El gran fallo de esta película es la primera media hora. Ayuda a contextualizar, es cierto. Pero empobrece un poco la nota. Demasiado lenta para mí gusto. Es el único fallo de un atrevidísimo guión en el que pocas cosas sobran. Maltrato infantil, homosexualidad, soborno, corrupción, palizas… todo expuesto a nuestra vista sin ningún pudor. No deja bien al Gobierno turco de la época pero tampoco al estadounidense. No deja títere con cabeza.
Los diálogos están cuidados al milímetro y se coordinan perfectamente con las escenas. Los sucesos están bien hilados y la tensión es palpable. Un gran trabajo del oscarizado Oliver Stone.
En cuanto a las actuaciones destaco sin duda a Brad Davis. Es una interpretación que deja sin aliento. Es creíble como
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El resto del elenco no desmerece en absoluto. La escena en la que:
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La dirección juega muy bien con las luces y las sombras. Saca un gran partido a la oscuridad. Juega con planos que nos pueden resultar extraños pero que consiguen un gran efecto junto con la iluminación, el guión y las actuaciones.
El maquillaje es muy bueno. Los personajes parecen constantemente sucios y maltratados. Hay un destacable trabajo de caracterización para conseguir un gran parecido entre los personajes reales y los de ficción.
Los decorados son lo que deben ser: sucios. Dan asco. Una sensación de continua suciedad, de repugnancia a la hora de pensar en tocar cualquier cosa que pertenezca a ese lugar. Calles llenas de polvo, cárceles que se caen a cachos, presos que se bañan y a los diez minutos están ya cubierto de la roña que lo impregna todo.
La música. Uff, la música. La música ganó el Oscar a la mejor banda sonora y aún me pregunto por qué. Tiene una buena canción: Istanbul Blues. El resto es tecno setentero del malo. Tan malo que es incómodo de escuchar. Mejoraría mucho si no tuviésemos que escuchar semejante despropósito. La he escuchado en Spotify a ver si era problema de la calidad de sonido de la época pero no, es que es muy mala.
El doblaje está muy bien, podéis verla tal cuál sin ningún problema.
Curiosidades:
—Los actores escogidos para Billy y para su padre son idénticos a los reales. Otra gran labor de maquillaje.
—Está basada en hechos reales.
—Está basada en el libro «Expreso de medianoche» escrito por el propio Billy Hayes.
Premios:
—Oscar a la Mejor Banda Sonora, de Giorgio Moroder.
—Oscar al Mejor Guión Adaptado, a Oliver Stone.
La tengo en VHS por mi casa. Y realmente es una de esas pelis que te impactan y se quedan grabadas para siempre. Muy buena.
La vi hace un montón de años y me quedé alucinado. Sigue gustándome como el primer día. Curiosamente en mi mente siempre relaciono esta película con The Wall, supongo porque vi las dos en casa de mi hermano en la misma temporada, aunque también se deberá probablemente a que las dos hablan de lo jodida que es la condición del ser humano cuando quiere castigar y reeducar a los demás.
Una joya altamente recomendable con la advertencia de que es una película bastante dura.
Muy dura, pero me encantó. Tendría que volver a verla, porque me la pusieron en estudio hace muchos años (sí, en estudio, esa asignatura para ver películas mientras la otra mitad de la clase pierde el tiempo en religión) y aunque me acuerdo bien de ella, tengo que revisionarla con más madurez.
Oscar a la mejor banda sonora? Qué malas debieron ser todas ese año!
El resto de la película es una delicia y la crudeza y transgresión de la película, los temas que trata (sobre todo para ser de 1975)... tuvieron que ser realmente rompedores.
En mi opinión, la primera hora no tiene nada de qué arrepentirse; es una gran presentación y crea el contraste perfecto con el resto de la cinta :P.
La primera media hora y la música le quitan puntos. Pero sigue siendo una película muy buena y que no ha envejecido mal.