Este es un buen ejemplo de lo que no debe hacerse en el cine. Cuando una saga está acabada y bien acabada, es mejor dejarla así que hacer subproductos como este, que carecen totalmente de interés y cuya mayor aspiración es convertirse en pasto de freakies que acuden al videoclub los fines de semana en busca de alguna serie b que no hayan visto, por cutre que sea.