La reseña la he copiado de Ktarsis porque me ha gustado tal cual estaba.
Que Justified comience con un duelo al sol es toda una declaración de intenciones. La serie es un western al uso, con sus damiselas en peligro, sus mujeres fatales, sus tipos duros, sus criminales sin escrúpulos y su antihéroe anacrónico. Con su sombrero, sus botas y su pistola siempre a punto, Raylan Givens parece haberse exiliado de una película de Peckimpah, Leone o Ford y haber terminado, muy a su pesar, en pleno siglo XXI donde, por supuesto, es un tipo incomprendido. Dispararle a alguien en el vientre por ser un canalla, partirle la cara a unos tipos por ofender a una dama ausente o dialogar amablemente en pleno tiroteo no está al uso, pero eso no parece preocuparle demasiado al marshall Givens. En torno a su peculiar, reconocible y, con el paso de los capítulos, apreciada figura, se sujeta una de las pequeñas sorpresas de esta temporada.
Justified no es una serie grandiosa ni desde luego es el gran bombazo que buscaba FX para sustituir a The Shield. Es, como Sons of Anarchy, un show con un comienzo interesante aunque algo tibio que va ganando en consistencia y atractivo conforme avanza la temporada. En la cadena, ya se sabe, todo avanza lento pero seguro y es más que probable que tanto esta Justified como los citados Hijos de la Anarquía terminen alcanzando altísimas cotas de calidad en breve. Por ahora Justified se concentra en ofrecer un cuidado entretenimiento plagado de diálogos brillantes, personajes sólidos y una gran variedad en sus guiones para acompañar a una trama general en principio un tanto difusa pero que, sobre todo en el tramo final de la temporada, ha ido ganando en importancia. Se nota que el creador de las novelas en las que se basa la serie, Elmore Leonard, está detrás de los guiones, cuidando, protegiendo y mismando a sus personajes y elaborando su historia con mano de hierro.
Para completar las buenas vibraciones que deja la serie, esta cuenta con un reparto elegido con absoluta sabiduría. Timothy Olyphant no es un gran actor pero a base de instinto logra dotar a su marshall de un innegable carisma, tal vez porque encaja a la perfección en ese papel, a medio camino entre el caballero del sur, el pistolero implacable y el hombre de a pie realmente cabreado, y no necesita excesivos esfuerzos para convencer al espectador de su trabajo. Otro caso diametralmente opuesto pero igualmente efectivo es el de Walton Goggins. El ex- de The Shield logra una interpretación impresionante a base de un trabajo meticuloso, llegando a convertir a su Boyd en uno de los grandes villanos de la televisión y, sin embargo, un actor como Olyphant, de tal vez menos talento, logra mantener el tipo sin demasiados problemas cuando le toca compartir escena con un crecido Goggins. También se encarga de robárselas al dúo protagonista la siempre bellísima y efectiva Natalie Zea, que hace en demasiadas ocasiones sombra a Joelle Carter, la protagonista femenina del show metida de lleno en su rol de andante tragedia sureña.
Justified es por tanto una serie completa, con variedad en sus capítulos de relleno y creciente interés en su historia principal que retrata en cierto modo, y a través de las aventuras de un intrigante personaje y de quienes le rodean, el sur más profundo sin caer en el tópico ni en la exageración. Una historia de héroes y canallas al más puro estilo far west.
Entretenida y con rollete del que me gusta con policías, criminales, rollos de drogas, paletos violentos, etc...
Se ha confirmado que habrá segunda temporada.