No he leído la novela de James Clavell en la que se basa, así que no sé si es más o menos fiel. Lo que sí os puedo decir es que es un gustazo de miniserie (10 capítulos de una hora). Hay que tomársela con humor, porque es de 1980, pero vale la pena.
Uno de los temas principal es el choque cultural, el protagonista no tiene ni idea sobre cómo es la cultura en la que está, y los únicos occidentales a los que puede recurrir son de paises con los que el suyo está en guerra.
Después tenemos toda la trama entre señores feudales y el dilema moral en el que están los jesuitas.
Además, Richard Chamberlain está muy guapo.