Videojuegos

Un juego de Hello Games con una hermosa carga narrativa y un contexto que te invita a reflexionar. 

Al inicio varios personajes navegan en un rio, dejando a un último resagado, todos van hacia su hogar, pero en el último instante el resagado pierde su remo y se aleja del resto, quienes siguen su camino sin preocuparse por él.

Así inicia esta aventura, un videojuego corto cuya base son los rompecabezas, pero que tiene una fuerte carga emotiva. La historia inicia con Ember quien ha despertado de un sueño, y se encuentra en un mundo donde otras como ella estan perdidas, no sabe donde está, pero quiere volver a casa. El juego las denomina  Ascuas, o almas, el componente espiritual es innegable, y no hace relación a ninguna religión, pero si la tendencia fuerte de la autoreflexión sobre las crisis emocionales que los seres humanos presentamos.

Amber pronto se encuentra en un mundo donde hay muchas como ella que estan perdidas, pero que a la vez han caido en una profunda depresión y ella debe ayudarlas a despertar. Cada vez que el personaje toca un ascua perdida se muestra un rompecabezas, el cual debes resolver para despertar al alma perdida, mientras en el proceso una narradora habla de lo que esta pensando ese personaje. Una vez pasas el rompecabezas, y ayudas a la amiga, esta se encuentra contigo en una fogata custodiada por un espiritu.

Es así como  a medida que vayas ayudando, vas abriendo las puertas y acercandote a volver a casa.

Desde lo personal, y si bien puedo estar revelando un asunto totalmente intimo, este juego me tocó bastante. El juego habla de depresión, de perder la esperanza y de situaciónes que no son ajenas a muchos, cuando la soledad, el miedo y la desesperanza tocan la puerta. El juego hace un análisis de ese parálisis  que se sufre cuando no encuentras alternativas, donde cuando a pesar de que lo intentas sigues sin conseguir lo que buscas y  simplemente te haces un ovillo queriendo morir.

The last Campfire tiene un mensaje sobre no rendirse, continuar y  sobre todo ser la luz  de otros en los momentos que los demás lo necesitan, de como necesitamos de los demás, y  además, respeta de manera muy simbolica cuando una persona dice "se que estoy mal, pero no estoy preparada ahora para recibir ayuda".

El juego dura poco más de cinco horas (yo gaste 7), los rompecabezas no son extremadamente dificiles, aunque he de confesar que en un par tuve que mirar como lo resolvian y me  cuestione de que tuviera algún retardo mental, por no ver asuntos tan obvios.

Recomiendo este juego, es corto pero satisfactorio. Es un juego que muchos deberian jugar.