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Fantasía Ficción interactiva Puzzle

Nilfgaard, con su poderoso ejército, amenaza a todas las naciones del norte, y los reyes del norte se han reunido en cónclave para decidir cómo lidiar con el belicoso imperio. Y por si estos problemas fueran pocos, volviendo de ese cónclave, Meve, la reina de Lyria y Rivia, recibe noticias de que los bandidos aterrorizan parte de su territorio, y la reina guerrera tendrá que lidiar con los problemas que su hijo, al que había dejado al cargo, ha sido demasiado incompetente para resolver por sí mismo.

En Thronebreaker, el jugador se pone en el papel de Meve, la reina que encabezó la resistencia contra Nilfgaard en la época previa a la historia de The Witcher. Meve tendrá que buscar aliados, librar batallas (mediante duelos de cartas) y tomar difíciles decisiones para asegurar su victoria, mantener su ejército y asegurar el futuro de su reino.

En Thronebreaker, cada capítulo tiene su propio mapa, con lugares de interés generalmente marcados con lo que vas a encontrar cuando te acercas a ellos (aunque hay sorpresas en algunos lugares), lo que hace administrar fuerzas y recursos relativamente fácil. El jugador mueve a Meve por el mapa recogiendo recursos, derrotando enemigos y monstruos en los lugares marcados con batallas y tomando decisiones sobre qué hacer en los encuentros sin combate.

A nivel narrativo, Thronebreaker es una delicia, y totalmente recomendado para los fans tanto de los libros como de los videojuegos. El tono de los libros ha sido fantásticamente bien captado, pero con personajes nuevos e interesantes, y una historia que nos permite ver nuevos lugares y diferentes aspectos del mundo. Y los actores de voz (al menos, en inglés) han hecho un fantástico trabajo. La historia avanza a través de episodios de texto, donde lo más importante para Meve es decidir qué decisiones tomar. ¿Se ganará la lealtad de los suyos siendo compasiva o es mejor ser severa en los castigos y desalentar crímenes peores?¿Ayudará a los que lo necesitan, a riesgo de quedarse sin recursos para su propio ejército o lo más importante es mantener las fuerzas para la lucha? Las decisiones que tome tendrán consecuencias y un tema recurrente en la historia es la de escoger el mal menor. En muchos casos, no hay una decisión buena y una mala, sólo lo que esperas que sea mejor en conjunto. Y a veces, una decisión similar con gente diferente o circunstancias diferentes va a tener resultados opuestos (y no hay volver a un archivo salvado anterior si los resultados no te gustan, el juego se guarda automáticamente tras cada decisión, y sólo hay un archivo por partida).

Pero aunque es un juego del universo de The Witcher, no es un juego sobre los brujos, ni sobre Geralt de Rivia. Hay cameos y referencias, e incluso Geralt aparece de forma prominente en la portada del juego (en mi opinión, de forma un tanto engañosa), pero los personajes protagonistas de los libros y videojuegosprincipales no juegan ningún papel importante. Que nadie espere a Geralt o a Jaskier charlando con Meve en la cantina de los aliados.

¿Te apetecen unas manos de Gwent?

¿Has jugado a The Witcher 3 y has pensado "cazar monstruos y salvar al mundo está bien, pero lo que de verdad quiero hacer es jugar al juego este de cartas"? Pues estás de suerte, porque las mecánicas de batallas de Thronebreaker están basadas en el juego de Gwent que se creó para The Witcher 3, y que se hizo lo suficientemente popular para dar lugar al juego de cartas online. De hecho, jugando a Thronebreaker puedes desbloquear cartas y recursos para usarlas en el juego online. Aún así, las cartas de Thronebreaker tienen habilidades propias, y son diferentes en juego tanto de las de The Witcher 3 como de Gwent online.

A medida que Meve establece alianzas, participa en ciertos acontecimientos o enrola a ciertos personajes en su ejército, el jugador conseguirá cartas con las que hacer su mazo. De algunas podrá comprar las copias que necesite en su campamento, tras mejorarlo lo suficiente, mientras que otras representan personajes o fuerzas o fuentes de poder de las que tendrá una sola copia o un número limitado.

Hay tres tipos de batallas: estándar (a tres rondas), cortas (a una ronda, la mayoría de las batallas del juego), y de rompecabezas (con cartas prefijadas en la mano, en las que hay que usar la lógica para decidir el orden y cómo usarlas para resolver la condición de victoria)

Y si el juego es fantástico en la parte narrativa, a los amantes de los desafíos los va dejar un poco insatisfechos. Aunque acostumbrada a juegos de cartas coleccionables, no es que yo sea una jugadora extraordinaria, y aún así, si bien al principio los duelos me resultaron un poco más complicados, cuando aún no tenía demasiado con lo que trabajar y aún me estaba haciendo con cómo funcionaba, y en ciertas batallas concretas más adelante tuve que replantear el mazo o la estrategia, a medidas que conseguí mejoras para el mazo lo habitual es que acabara ganando sin esfuerzo por cientos de puntos de diferencia y con todas las cartas del adversario destruidas, jugando en dificultad normal.

¿Significa eso que el juego es aburrido? En absoluto. A nivel de historia y personajes, realmente te atrapa y considero una pena que no esté más reconocido. Los puzles lógicos son siempre diferentes, distintos enemigos tienen mazos con distintas mecánicas, que aportan variedad en la estrategia a seguir de juego. Pero no es el juego al que vayas para poner a prueba el límite de tus habilidades. Pero para los que prefieren primar la historia, y jugar a su propio ritmo sin preocuparse de quedarse atascados en combates imposibles, el juego es más permisivo aunque no seas un jugador experto.