Personalmente no me gustó. No digo que sea una mala lectura, pero no es mi estilo. Será de interés para los que quieran saber más de la vida de esta escritora y de ese periodo histórico, ya que conoció a muchos personajes influyentes de la época. Incluso puede ser del gusto de los aficionados a programas de televisión tipo “El diario de Patricia” ya que hay una amplia exposición de dramas y miserias humanas.
Lo que a mí me cansó fue la alternancia de estados anímicos de la escritora. En un momento está totalmente deprimida y ve la vida desde un pozo oscuro, y al siguiente es completamente optimista y está llena de la alegría de vivir.
Además, están los culebrones de sus relaciones sentimentales y sexuales con los diferentes hombres y mujeres que pasan por su vida. Tuvo una vida interesante, eso seguro, pero no es algo que a mí me guste leer. Estoy demasiado acostumbrado a la ficción y me parece que la vida real tiene demasiados cabos sueltos y demasiada complejidad. Encima Anaïs está obsesionada por Henry Miller, que a mí me cae bastante antipático.
Resumiendo; yo os he contado de qué va el libro y por qué no me gusta a mí. Reconozco que no es malo y que a otras personas con otros gustos – quizá a vosotros – les podría gustar mucho.
Si es que yo la vida real ya la tengo cada día y con la mía tengo suficiente. Soy poco cotilla y no me interesa la de los demás. :P
No he leido a Anaïs Nin, pero sí a Henry Miller, y sin meterme en temas estilísticos, porque seguro que tendrán cosas en común y cosas muy diferentes, no me extrañaría que lo que no te gusta de la autora es lo que no me gustó de él como autor. Henry cuenta en sus libros su vida, tal como la vive o como quiere parecer que la vive. Y en el fondo hay algo muy creible en él como personaje, precisamente porque es muy subjetivo. Es decir, muestra la visión de un neurótico como la copa de un pino tal como cuenta las cosas.
Es una lectura decadente a tope porque la narra una persona que está orgullosa de ser y vivir experiencias sin que le cambién un ápice. Conocen cientos de personas, tienen una vida sexual muy variopinta, no tienen que trabajar sino que hacen lo que quieren o pueden, manipulan, engañan y manejan a los demás para sus propósitos y aún así, no son felices ni obtienen ninguna enseñanza personal duradera.
En términos psicológicos, se les llamaría personalidades borderline. Yo me cago en la etiqueta, pero reconozco que son un prototipo perfecto de esta tipología. Fue una lectura muy ilustrativa, pero no me enseñó más que a desear hacer terapia para no convertirme en un neurótico así, jejeje. Al final, algo positivo le saqué.
No lo he leido, pero al leer la reseña me he encontrado con ésto:
Cita:
Eso es básicamente lo que nos pasa a todos. Ten en cuenta que un libro no se escribe en un día, y si estaba plasmando sus impresiones, digo yo que tendrá cambios de ánimo... xDDD