El 8 de agosto de 2026 todas las agencias espaciales del planeta recibieron el mismo mensaje: una transmisión de radio que parecía provenir desde Saturno, pero la interferencia de lo que fuera que estaba emitiendo era tal que no se podía acceder a la locación precisa de emisión. Sí se sabía que lo que fuera que estaba allí se había posicionado en el lado oscuro del coloso y no se dejaba ver.
Hubo un gran revuelo sobre lo que esto podía significar mientras la comunidad científica murmuraban por lo bajo las palabras "contacto alien" que rápidamente eran desmentidas. Se barajaron varias hipótesis a nivel militar y se decidió enviar una misión de exploración a nivel planetario, para ello se seleccionaron aplicantes de todo el mundo y se agregó una novedad: tres personas civiles serían entrenadas para acompañar la misión.