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Debo decir que es una serie que logró asustarme con bastante efectividad desde el primer capitulo. Pero tiene un fallo grande, en cuanto al miedo. Capitulo tras capitulo la cosa pierde gas. No se hace obvio hasta que llegas al octavo. Pero los dos últimos el efecto ya es terrible. Lo que podría haber sido una gran obra del genero, pincha por un final que no la dignifica, sino que la estropea.

Estamos ante uno de esos casos que representan perfectamente lo importante que es un buen final para rematar una buena historia. Un buen final puede incluso arreglar una mala historia. John Carpenter debería escribir un libro sobre este tema.

Si dejamos de lado el horror, me sorprendió lo bueno que es el guion y las interpretaciones. Tanto actores adultos como infantiles transmiten perfectamente y las historias que nos van contando calan y consiguen que empaticemos. Esta lleno de actores que os harán decir... [I]"coño, esta cara la conozco"[/I].

A la cabeza de ellos, está Henry Thomas, en el papel del "joven" Hugh Crane. Henry Thomas. El que hizo de Elliot en ET. Si, ese. Y Timothy Hutton, y Carla Gugino.

Luego está la música, que es una de esas sintonías que se nos quedan en la cabeza. Ahora, con la funcionalidad de las plataformas digitales, hay veces que nos las saltamos, pero esta sintonía y el "opening" es tan bueno que lo dejo siempre, como me pasaba con "El Hombre en el Castillo" y "The Expanse". Música por cierto, a cargo de The Newton Brothers.

Es decir, guion muy bueno, casi completamente. Actuaciones, muy buenas. Dirección, vestuario, decorados, música. Buenas. Y sin embargo, me dejó un mal sabor de boca por el final tan... tan... (A PARTIR DE AQUÍ, A TU PROPIO RIESGO)

[spoiler]... Vamoaver... ¡Pero que me estas contando! Una casa que debía ser el cagarse, que tenía que tener unos demonios dentro que se comerían a una legión de monjas rezando el rosario, termina convertido en una suerte de resort para almas en pena que da menos miedo que saltarse la dieta.

En serio, el super fantasma super malvado se dedica a contarle a Hugh como se los fue cargando a todos los habitantes originales de la casa (una señora con pinta de corista de los años veinte) y viene el fantasma de la mujer de Hugh, Olivia, y la dice que se pire. Y se pira. ¡Se pira! ¡Cojones, se puede saber quien manda en la casa?

Y luego los guardeses. Me hizo empatizar a tope en los últimos episodios, pero al final... WTF! Esa gente que iba de super religiosa y ahora me cuentas que mola mucho la casa porque puedo seguir conviviendo con el fantasma de mis niños... ¿Que? ¡Que si es por ahorrarse la universidad, existen las becas!

En definitiva, como pasar en un solo capítulo de "La Leyenda de la Casa del Infierno" a "Scary Movie".

Un horror. El final.[/spoiler]