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Este juego, que no podría calificar 100% como tal, es descrito por sus mismos desarrolladores como un poema interactivo. Narra una historia sobre una madre y su hija, a través de los recuerdos y de la culpa.

En el trailer, se puede apreciar  el peso ártistico de esta obra, la cual desde un inicio invita a una experiencia diferente, ciertamente no se podía esperar algo diferente de Anapurma, una de las compañias que más me gustan por el desarrollo de juegos que invitan a la reflexión y a despertar sentimientos profundos. Este juego,  fue anunciado recientemente en una presentación de la compañía, y cuando lo vi, no dude en  ponerlo en lista de deseados, y comprarlo  una vez salió. Su precio es muy accesible y creo que es meritorio apoyar este tipo de compañias.  La empresa que lo desarrolló es Cloister interactive, una empresa pequeña que ha ganado algunos  reconocimientos en el entorno Indi, aunque no cuentan con muchos juegos, este es como su carta de presentación.

Este juego salió inicialmente para Steam, pero, han anunciado que saldra para Xbox y para Playstation.

Un viaje desde los simbolos

Si bien no voy a dar ningún spoiler significativo, pues el juego es  muy corto  y es mejor que cada quien  viva la experiencia,  si puedo decirles que es  obvio el nivel simbolico  que utiliza, lo que reafirma su definición como un poema. El agua, elemento común es utilizada simbólicamente para asumir sentimientos, luchas y  fluidez,  la utilización de la música y el uso, muy curioso, de dos tipos de arte, el primero con tendencia al realismo, y el segundo a la caricatura, como un simil  de la búsqueda del niño interior.

Un viaje breve, con secuencias rápidas, y un estilo simple.

El juego en si dura, unas dos horas, aunque  puedes tratar de conseguir todos los logros, pero en definitiva no  gastarás mucho tiempo en eso, es un juego que seguramente jugaras de seguido.

Debo confesar que cuando comence a jugarlo estaba un poco confundida, no entendia  que debía hacer, la verdad me sorprendió su simplicidad,  y me sucedió algo  muy curioso, que me da un poco pena confesar, al inicio  tras las interacciones iniciales, me quede estancada en un paisaje, clickeaba y clickeaba en los objetos y  no encontraba que hacer. Tuve que ir a youtube a  ver que era lo que yo habia hecho mal, y resulta que la respuesta era muy simple, lo único que tenía que hacer era arrastrar un objeto. Me senti tontisima, pero realmente al inicio no sabes mucho de como va el tema, pues no hay tutorial ni nada, tú debes descubrirlo, a partir de ello ya todo fluyó  con normalidad.

Así mismo comence a jugarlo con mando, y como tengo un pc portatil, me di cuenta que le sacaba más gusto jugandolo con el ratón tactil de la pc, por el hecho que uno debe arrastrar.  Me costó mucho acostumbrarme a usar el mando en este juego,  aunque se puede hacer perfectamente, solo qué  me fue más fácil y satisfactorio utilizando mis dedos.

Aunque debo decir que el juego tiene ciertos logros que no son tan fáciles de sacar,  su solución son una tontada, pero muchas veces llegas a ellos por causalidad,  y algunos son no tan intuitivos.

Uno queda con ganas de más.

Ciertamente no es perfecto, es una experiencia recomendable, pero  se generan ciertos  vacios que me hubiera gustado jugar un poco más, para una conclusión más clara. Es de esos juegos cuya conclusión depende mucho de la percepción, aunque lo que si es claro, es la enseñanza, o reflexión que  pretenden transmitir, y es más, este juego podría analizarse perfectamente en una mesa redonda de psicología y dar conversación para rato. No terminas templando y super emocionado como en juegos como Journey, pero la experiencia es satisfactoria, no tan impactante (o esto puede ser muy personal), pero autentica.

Si te gustan este tipo de experiencias te lo recomiendo.